Únete gratis y recibe CARTAS llenas de reflexiones profundas y transformadoras sobre el vivir consciente, la autenticidad, y cómo vivir alineado con tu propósito.
Recibe mis cartas
A veces buscamos culpables afuera.
La otra persona.
El sistema.
La economía.
La falta de apoyo.
La gente que “no entiende”.
El tiempo que “no alcanza”. Las oportunidades que “no llegan”.
Pero hoy quiero decirte algo incómodo. Como quien te sacude un poco, con amor, porque no me gusta hablar con anestesia:
La mayoría de las veces, el verdadero obstáculo no está allá afuera. Está en ti.
Sí, tú. Con tus excusas elegantes. Con tus hábitos que te sabotean en silencio. Con tus rutinas automáticas que repites a pesar de que sabes que no te llevan a donde quieres ir. Con ese cuento bien armado que llevas años contándote para justificar por qué no estás donde podrías estar. Y lo sabes.
No se trata de perfección. Se trata de honestidad. Y la verdad es que, aunque no te des cuenta, tú mismo eres quien bloquea tu camino.
¿Puedes ser completamente honesto contigo, aunque duela?
Dices que quieres paz, pero no sueltas el resentimiento.
Dices que quieres amor, pero te cierras cada vez que alguien se acerca.
Dices que quieres abundancia, pero actúas desde miedo y escasez. Dices que quieres avanzar, pero vives postergando, dudando, distrayéndote.
No se puede tener claridad cuando uno mismo se miente. No se puede tener éxito cuando se vive desde la resistencia. Y no se puede crecer si cada vez que llega el momento de tomar responsabilidad, eliges la comodidad.
Hoy quiero hablarle a esa parte de ti que ya está cansada de vivir por debajo de su verdad. Esa parte que sabe que hay más. Que merece más. Que puede más. Pero que para acceder a eso, necesita dejar de ser cómplice de sus propias cadenas. Así que hoy vamos a poner las cartas sobre la mesa.
Respóndete con honestidad:
1. ¿Cuál es tu deseo más grande en este instante?
2. ¿Qué comportamiento, hábito o actitud te está alejando de ese deseo? ¿Qué es eso que tú mismo estás haciendo (o no haciendo) que bloquea lo que más quieres?
Escríbelo. No lo edites. No lo maquilles. Sé brutalmente honesto.
Y luego proponte trabajar de forma intencional en transformarlo. No por presión. No por obligación. Sino porque te lo mereces.
Tú no viniste a esta vida a sobrevivir. Viniste a despertar, a asumir, y a crear la vida que deseas vivir.
Ahora que lo tienes frente a ti —eso que tú mismo reconoces que te está bloqueando— no mires hacia otro lado.
Ya no puedes hacerte el desentendido. Ya no puedes seguir diciéndote que “no sabes qué hacer”. Porque sí sabes. Lo acabas de escribir. Lo ves. Lo sientes.
Y aquí es donde viene lo más importante: responsabilizarte.
No con culpa. No con látigo. Con conciencia.
Porque mientras sigas permitiendo que eso tenga poder sobre ti, estás eligiendo mantenerte lejos de lo que más deseas.
Sí, es incómodo. Sí, va a costar. Sí, vas a tener que enfrentarte contigo mismo una y otra vez.
Pero también es el único camino si de verdad quieres algo distinto.
No puedes seguir esperando un resultado nuevo con los mismos hábitos viejos. No puedes seguir soñando con transformación mientras te comportas desde la misma versión que te trajo hasta aquí.
No puedes exigirle a la vida algo que tú mismo te estás negando.
Cambiar tu vida requiere decisión. Requiere acción consciente. Requiere compromiso más allá del impulso emocional del momento.
Y, sobre todo, requiere dejar de negociar contigo mismo cada vez que el proceso se pone incómodo. Porque va a pasar. Vas a querer rendirte. Vas a querer justificarte. Vas a querer volver a lo conocido y a lo cómodo.
Pero si quieres una vida diferente, tienes que convertirte en alguien diferente.
No se trata de convertirte en otro. Se trata de volver a ti. A tu versión más honesta, más consciente, más determinada.
Tú ya sabes lo que tienes que hacer. Lo difícil no es saberlo. Lo difícil es hacerlo aunque duela, aunque incomode, aunque canse.
Y esa es la invitación de hoy:
Deja de ser parte del problema y comienza a ser parte de tu solución.
Ya no culpes al tiempo, a la gente, al sistema.
Mira hacia adentro.
Ahí está la puerta.
Y también la llave.
Porque si no lo haces tú, nadie lo hará.
Y porque te lo mereces.
Esta carta también va para mi, porque soy humano igual que tú 😉
Con amor crudo y responsabilidad,
MEDITA: Aprende a meditar y crea una sólida práctica meditativa desde cero. Regístrate aquí: https://academia.nilodelmonte.com/medita
EL PODER DE SER TÚ: Abrazando tu autenticidad para una vida plena. Conéctate con tu verdadero ser y vive una vida alineada con tu esencia.
Regístrate aquí: https://academia.nilodelmonte.com/autenticidad
Únete gratis y recibe CARTAS llenas de reflexiones profundas y transformadoras sobre el vivir consciente, la autenticidad, y cómo vivir alineado con tu propósito.
Recibe mis cartas
www.nilodelmonte.com - Nilo del Monte ®